GOAT - LET IT BLEED

, , Sem Comentários
Let it bleed
GOAT
SONGWRITER: ROLLING STONES
COUNTRY: U. K.
ALBUM: WORLD MUSIC
LABEL: DECCA RECORDS
GENRE: ROCK
YEAR: 1969

Let It Bleed é o décimo álbum de estúdio na Discografia Americana, e o oitavo na Discografia Britânica da banda de rock inglesa The Rolling Stones, lançado em 29 de dezembro de 1969 pela Decca Records/ABKCO Records no Reino Unido e pela London Records/ABKCO nos Estados Unidos. É o último álbum da banda a ter a participação de Brian Jones (harpa em "You Got the Silver" e percussão em "Midnight Rambler"), que foi expulso da banda e morreu pouco tempo depois em circunstâncias até hoje misteriosas. Este álbum está na lista dos 200 álbuns definitivos no Rock and Roll Hall of Fame.
Let It Bleed alcançou a posição de número 1 no Reino Unido (batendo Abbey Road dos Beatles) e a terceira posição no Top Pop Álbuns da Billboard nos Estados Unidos, onde foi platina duplo. Foi o primeiro álbum dos Stones a ultrapassar a marca de dois milhões de cópias vendidas nos Estados Unidos.
I’m faded, I touch the block
Machine gun, through the lot
They walking past, famous peep
Gotta go, let it bleed

I gotta fall, for me at first
Let it burn, put to rest
Keep for beast, keep for us
Does it mean...
They walking past, famous peep
Gotta go, let it bleed

[Sax solo]

Let it bleed, bleed, let it bleed
Let it bleed, bleed, let it bleed
Let it bleed, bleed, let it bleed
Let it bleed, bleed, let it bleed
Let it bleed, bleed, let it bleed
Let it bleed, bleed, let it bleed.


Músicas del mundo, venid y uníos en Goat

La World Music que proponen Goat no suena al baúl de los recuerdos, ni a corrientes multiculturales contemporáneas que, de tanto girar sobre sí mismas, ya resultan mareantes y aburridas. Esto no es una base pop sobre la que se despedazan dos o tres citares, algún déjeme y arreglos de digerido. Goat no se valen de la música del mundo para presentar un producto más o menos convencional, sino que parten de ella para explorar terrenos tan aparentemente dispares como el avant-folk o la psicodelia. Su utilización de la world music es honesta y talentosa, y por eso suena así de fresca.
No hay que pensar en World Music, no obstante, como un disco intrincado y difícil de afrontar. Todo lo contrario. Desde la complejidad de distintos géneros musicales, el colectivo sueco presenta composiciones adictivas capaces de conquistar el mundo. En World Music podemos rastrear elementos del heavy psych (‘Diarabi’,‘Goatman’), de la música disco (‘Disco Fever‘), del folk progresivo de Fairport Convention (‘Goatlord’) y por supuesto del pop, que está presente de espíritu en las nueve pistas que forman el disco.
Goat, además, se ciñen a la ola revivalista del krautrock y la psicodelia, que abarca bandas tan dispares como Lüger, Lumerians, Dead Skeletons o Toy, aportando puntos de vista antes inimaginables. Podemos pensar en las virtudes eléctricas de los grupos de blues africano (Tinariwen o Terakraft) o en el sentido folk de los grandes maestros de los instrumentos de cuerda malienses (Toumani Diabaté o Alí Farka Touré). La música africana sobrevuela de forma inevitable World Music, desdeel tapiz que ilustra la preciosa portada hasta los propios ropajes del colectivo.
A todas estas virtudes hay que añadir un sentido rítmico sobrenatural, indisimuladamente bailable. Goat son un compendio de la música negra del siglo XX y tampoco hacen ascos al funk de Parliament o Funkadelic. Y sin embargo, no son un grupo estrictamente negro, porque buena parte de los pilares esenciales de su música están construidos con los mimbres de la psicodelia eléctrica y acústica, el fuzz y los desvaríos wah-wah, sin dejar de lado cierto deje experimental que se aprecia especialmente en el desarrollo kraut-jam de ‘Det som aldrig förändras/Diarabi’.

GOAT Y TODO LO DEMÁS

Las voces (femeninas, por cierto) también tienen reminiscencias de los cantos de llamada y respuesta, dirigiendo nuestra mirada de nuevo al continente africano. Es la gema que completa un pastel de proporciones escuetas, pero muy sabroso. Todas y cada una de las piezas que componen la tarta, además, esconden ciertas virtudes pop que estallan en la estupendísima ‘Let It Bleed’, un hit auténtico que lo tiene todo para ser una de las mejores y más exquisitas canciones del año, desde sus repetitivos y adictivos acordes de guitarra hasta los arreglos de saxo y los coros extasiados.
Porque a semejante catarata de referencias hay que añadirle el elemento fundamental para que World Music sea, no tengamos miedo a reconocerlo, uno de los discos más emocionantes del año: la diversión que parece emanar de forma sencilla y natural de Goat, como si no hubieran llegado del rincón más siniestro y oscuro de Suecia, como ellos mismos dicen, como si su espíritu, quién sabe si efecto del vudú, hubiera estado bañado durante toda su vida por las aguas del Mediterráneo. Una frescura y una química como grupo que es una auténtica bendición.
Todo lo demás ayuda. Tanto las máscaras, como la obsesión por las cabras como que, al parecer, en sus directos un hombre aparezca y clame a los cuatro vientos que él y no otro es el undécimo hijo de las plegarias vudú. Es el atrezzo seguramente inevitable a una fusión multicultural tan efectiva. Merece la pena comprar la historia de Goat si lo que adquirimos a cambio es una clarividencia de ideas musicales así de sólida. De todos modos, leyendas más grandes se han levantado en torno a mentiras más endebles, y podemos otorgar a los suecos el beneficio de la ingenuidad. Se lo han ganado.

0 comentários:

Postar um comentário